ES HORA DE DESPERTAR....
Ya estamos en una etapa de los tiempos finales en donde la GUERRA ESPIRITUAL entró en una etapa sin precedentes. Lo que se está viviendo en Washington D. C. no es sino muestra de esto. La GUERRA ESPIRITUAL ya no es asolapada sino abierta, en frente de nuestra cara. LAS HUESTES SATANICAS ESTAN DESESPERADAS Y ESTAN USANDO TODOS LOS MEDIOS Y RECURSOS A SU ALCANCE PARA PARAR ESTA NOMINACION.
Un día antes de las audiencias para interpelar
al candidato a la Corte Suprema de los Estados Unidos, el Arco de Baal fue erecto
frente al Capitolio de la nación. Esto no es un evento artístico. Es un acto de
hechicería satánica para hacer la batalla espiritual. Es tiempo de DESPERTAR,
particularmente los intercesores que libran estas batallas. Ahora la guerra es
abierta y se está librando en todas las naciones.
El Arco de Baal es un símbolo del Dios
Moloc. Este es el que en la antigüedad se le ofrecían infantes en sacrificio a esa entidad espiritual.
Tal como hoy en día se hace con el aborto. El Juez Brett Kavanaugh es una
persona que representa una amenaza para acabar con esta maldición que es latente en Estados Unidos en este momento.
Es tiempo de ORAR e interceder para que los
principios de Dios sean respetados.
ASHLEY KAVANAUGH ha pedido su apoyo orando el SALMO 40 para su familia y la nación:
Sal 40:1-16
(1) Para el director del coro. Salmo de David
Al SEÑOR esperé pacientemente, y El se inclinó a mí y oyó mi clamor.
(2) Me sacó del hoyo de la destrucción, del lodo cenagoso; asentó mis pies sobre una roca y afirmó mis pasos.
(3) Puso en mi boca un cántico nuevo, un canto de alabanza a nuestro Dios; muchos verán esto, y temerán, y confiarán en el SEÑOR.
(4) Cuán bienaventurado es el hombre que ha puesto en el SEÑOR su confianza, y no se ha vuelto a los soberbios ni a los que caen en falsedad.
(5) Muchas son, SEÑOR, Dios mío, las maravillas que tú has hecho, y muchos tus designios para con nosotros; nadie hay que se compare contigo; si los anunciara, y hablara de ellos, no podrían ser enumerados.
(6) Sacrificio y ofrenda de cereal no has deseado; has abierto mis oídos; holocausto y ofrenda por el pecado no has requerido.
(7) Entonces dije: He aquí, vengo; en el rollo del libro está escrito de mí;
(8) me deleito en hacer tu voluntad, Dios mío; tu ley está dentro de mi corazón.
(9) He proclamado buenas nuevas de justicia en la gran congregación; he aquí, no refrenaré mis labios, oh SEÑOR, tú lo sabes.
(10) No he escondido tu justicia dentro de mi corazón; he proclamado tu fidelidad y tu salvación; no he ocultado a la gran congregación tu misericordia y tu verdad.
(11) Tú, oh SEÑOR, no retengas tu compasión de mí; tu misericordia y tu verdad me guarden continuamente,
(12) porque me rodean males sin número; mis iniquidades me han alcanzado, y no puedo ver; son más numerosas que los cabellos de mi cabeza, y el corazón me falla.
(13) Ten a bien, oh SEÑOR, libertarme; apresúrate, SEÑOR, a socorrerme.
(14) Sean avergonzados y humillados a una los que buscan mi vida para destruirla; sean vueltos atrás y cubiertos de ignominia los que se complacen en mi mal.
(15) Queden atónitos a causa de su vergüenza los que me dicen: ¡Ajá, ajá!
(16) Regocíjense y alégrense en ti todos los que te buscan; que digan continuamente: ¡Engrandecido sea el SEÑOR! los que aman tu salvación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario